Mini donuts con glaseado de chocolate

Estos mini donuts están de muerte, para que nos vamos a engañar, no están fritos, como los habituales, están hechos al horno, de este modo no tienen tanta grasa. La consistencia es esponjosa y ya con el glaseado de chocolate, (que os confieso ha sido el que más me ha gustado de todos los que he probado) madre mía, que te voy a contar, es un no parar de comer, es lo malo que tiene. 

Te animas a prepararlos para tomar en la merienda o acompañando a ese cafecito o té tan rico que te tomas después de comer?

Desde que me regalaron la maquina para hacer cake pops y donuts he estado buscando diferentes recetas para preparar dulces en ella, pero la verdad es que no me convencía ninguna, la mayoría dejaba la masa muy apelmazada, al día siguiente se quedaba duro y de sabor, bueno no muy allá. Al final encontré una en el blog de Sandeaa de La Receta de la Felicidad que es la que más me ha gustado. El donuts sale esponjosito, aguanta perfectamente un par de días sin que se quede para romper tabiques y además el glaseado de chocolate es muy parecido al de los donuts de toda la vida. ¿Qué más se puede pedir?

Si no tenéis la máquina se pueden hacer en el horno convencional y existen moldes con forma de donuts, en silicona o de metal, y también cortadores con esta forma. Si aún así no tenéis nada de esto, podéis coger y hacer la forma manualmente y colocarla en una bandeja anti-adherente. De esta forma quedará el donut un poco más esparramadito, pero no pasa nada. 

El hacer los donuts en horno es porque así tienen menos grasa, pero con esta receta también se pueden freír.

Pues dicho y hecho aquí tenéis los ingredientes:

300 g de harina normal
200 g de harina de fuerza
25 g de levadura fresca de panadería (tb hay levadura de panadería seca en sobres, en el Mercadona ambas)
80 g de azúcar
60 g de mantequilla a temperatura ambiente
10 g de sal
2 huevos tamaño L
250 ml de leche

1 cucharadita de vainilla
Para el glaseado de chocolate

200 g de azúcar glass

10 cucharadas de agua (unos 75 ml)
150 g de chocolate para fundir

Preparación:

Primero hay que preparar la masa de los donuts, se mezcla la levadura con la harina, si es fresca se deshace en miguitas, si es seca, echar el sobre y mezclar. Agregamos la mantequilla, el azúcar, la sal, y por último el huevo, la leche y la cucharadita de vainilla.  

Amasamos hasta formar una bola, la metemos en un bol y dejamos reposar en un lugar cálido tapado con un paño durante un par de horas. Después de ese tiempo, la masa quedaría tal que así, blandita y pegajosa.

Encendemos la máquina y cuando la luz se ponga en verde es que ya está a la temperatura adecuada. Con las manos untadas con un poco de aceite de girasol, cogemos pequeñas porciones de masa, y formamos una bolita con cada una de ellas. Hacemos un agujero en el centro con el dedo untado en aceite, y lo depositamos sobre cada hueco de la máquina de hacer donuts. Intentar en la medida de lo posible que los huecos queden cubiertos, sin que sobresalga masa, pero si os pasáis no os preocupéis porque una vez frío el donut, se puede quitar con facilidad la masa restante.

Una vez rellenos todos los huecos, cerramos la máquina y aquí hay que estar muy pendiente. Si no pasamos de tiempo, en cero coma se te queman y si no llegamos, se quedan crudos.  La máquina, como las sandwicheras hace un ruidito, "un clack", que te dice que ya está listo el donut, yo lo probé y se me quemaron un poco la verdad. Así que déjalo un minuto, mira como va de color, y si necesita déjalo un poquito más, máximo 2 minutos y ya me parece mucho. Tienen que quedar con este tono doradito, los colocamos en una rejilla para que se enfríen y vamos haciendo el glaseado.

Para preparar el glaseado de chocolate, mezclamos el azúcar y el agua en primer lugar. Fundimos el chocolate en el microondas, de 30 en 30 segundos, removiendo de cada vez, hasta obtener una mezcla homogénea. Vertemos el chocolate fundido sobre la mezcla de agua y azúcar, y removemos hasta que esté completamente integrado. Si nuestro glaseado de chocolate está muy espeso para nuestro gusto, podemos añadir un poco más de agua, o meterlo unos segundos en el microondas para que el chocolate se vuelva más líquido. Si en cambio el glaseado nos queda demasiado líquido, lo dejaremos reposar para que el chocolate al enfriarse se solidifique un poco y el glaseado se vuelva más denso.

Bañamos los donuts sólo hasta la mitad, los dejamos que el glaseado se quede sólido y ya están listos para comer. Si te han sobrado muchos, que lo dudo, porque ya te digo que es hacerlos y desaparecen rápido, los puedes congelar con glaseado y todo.