Ya llevaba tiempo con ganas de preparar una tarta de Cake Pops, y el cumpleaños de mi sobrina Martina ha sido la ocasión perfecta. ¿ Quieres ver como lo hice?

Los cake pops se hicieron de bizcocho de chocolate con frosting de queso y chocolate, y se cubrieron con candy melts y azúcar de varios colores, en definitiva un arcoiris en toda regla que encantó a los enanos y no tan enanos.

Los cake pops pueden ser una alternativa a las tartas de cumpleaños, ya que en muchas ocasiones, los niños apenas comen, prueban y las dejan a medias, y a veces, se tira mucha comida. Sin embargo, con esta opción, el propio cumpleañero se encarga de repartir a cada niño su "porción " de bizcocho, sintiéndose más protagonista aún, y los colores y formas resultan más atractivos para aquellos a los que las tartas no les hace mucha gracia.

En el cumpleaños de Martina, también hubo una merienda espectacular, y es que todo queda en familia, ¡qué artistas, jaja¡ Mi cuñada prepara unos catering y unas mesas preciosas para celebraciones en casa: piruletas de queso y jamón, molinillos de hojaldre con bacon, palitos de gominolas gigantes, etc.. así que si alguno está pensando en celebrar algo y no quiere cocinar, aquí tenéis la solución, para muestra un botón (perdón por las fotos, están un poco desenfocadas, pero os podéis hacer una idea)